Cançons Hora Santa

7 de novembre de 2022
Ven Espíritu, ven

Ven Espíritu, ven.
Y lléname, Señor
con tu preciosa unción.

Ven Espíritu, ven.
Y lléname, Señor
con tu preciosa unción.

Purifícame y lávame, renuévame,
restáurame, Señor,
con tu poder.

Purifícame y lávame, renuévame,
restáurame, Señor.
Te quiero conocer.

 

Pasión de Dios

¿Por qué tengo miedo de mí mismo?¿Por qué no disfruto hoy de cada minuto?¿Por qué querría ser de un modo distinto?¿Por qué vivo siempre en lo que haré?

Tanta cosa para motivarmeBasta ya de maltratarme¿Dime, Padre, por qué no me quiero?Solo tu aprecio mata mi desprecio

Hazme oír lo que te gustoQue vea que me miras con pasiónQue a nadie quieres tanto como a mí¡Soy pasión de Dios!

Me dicen que huya de mi debilidadTú me dices que permanezca en ellaMe valoran por éxitos y perfecciónTú disfrutas conmigo tal y como soy

Débil, enfermo y en pecadoImpuro, impotente y quebradizoSolo así descubro como me amasSolo así descubro como me quieres

Hazme oír lo que te gustoQue vea que me miras con pasiónQue te recreas en mi bellezaQue soy la niña de tus ojos

Que a nadie quieres tanto como a míEres mi padre y enloquecesQue a nadie quieres tanto como a mí¡Soy pasión de Dios!

Con la furía del marY la solidez de la rocaCon el ímpetu de la tormentaLa fuerza del vendaval

Con esa misma contundencia tú me dices“Tú eres mio, tú eres mio”Hazme oír lo que te gustoQue vea que me miras con pasiónQue te recreas en mi bellezaQue soy la niña de tus ojosQue a nadie quieres tanto como a míEres mi padre y enloquecesQue a nadie quieres tanto como a mí¡Soy pasión de Dios!

Huracán

Me he hecho tantas preguntasIntentando entenderMe he lanzado a buscarteSin saberte verMe he asomado al abismoMe he atrevido a saltar y caer

Y un huracánRomperá el cielo desde mi gargantaGritándote: “¿dónde estás cuando me haces falta?”

Y me han dado respuestasPero no sé qué hacerHe prometido seguirteSin entender

Y hay un eco en lo hondoQue me empuja hacia tiY aunque sea sin sentirteTe buscaré

Y un huracánRomperá el cielo desde mi gargantaGritándote: “¿dónde estás cuando me haces falta?”

Y un huracánRomperá el cielo desde mi gargantaGritándote: “¿dónde estás cuando me haces falta?”

Estoy aquí, en el silencioEstoy aquí, en este vientoEstoy aquí, soy este trozo de pan

Estoy aquí, en tu lamentoEstoy aquí, en este ecoEstoy aquí, soy este trozo de pan

Y un huracánRomperá el cielo desde mi gargantaGritándote: “¿dónde estás cuando me haces falta?”

Y un huracánRomperá el cielo desde mi gargantaGritándote: “¿dónde estás cuando me haces falta?”

Estoy aquí (y un huracán)(Romperá el cielo desde mi garganta) estoy aquíEstoy aquí (gritándote)Soy este trozo de pan (“¿dónde estás cuando me haces falta?”)

Estoy aquí (y un huracán)(Romperá el cielo desde mi garganta) estoy aquíEstoy aquí (gritándote)Soy este trozo de pan (“¿dónde estás cuando me haces falta?”)

Y tu huracánRomperá el cielo desde mi gargantaGritándome cuánto me haces falta

Mirada

Mirada Creadora, creando; la del Salvador, salvandoMirada de la comunión, amandoMirada de misericordia, del amor crucificadoMirada que penetra en mi alma un fuego abrasador

Enséñame, ¡oh Trinidad!, cómo es tu libre miradaEnséñame, ¡oh Trinidad!, pues es la más bella y preciadaLa más pura de amor

Mirada de verdad sincera, mirada de Rey que reinaMirada que envuelve mi vida y purificaMirada del principio y fin, mirada del ResucitadoMirada que deslumbra con su luz y al cegar, sana

Enséñame, ¡oh Trinidad!, cómo es tu libre miradaEnséñame, ¡oh Trinidad!, pues es la más bella y preciadaLa más pura de amor

Perdóname si cuando miro, miro sin mirarSi estos ojos que me diste no saben amarPues sólo veo cuerpos, sólo veo humanidadPero me pierdo, mi Señor, toda divinidad

Enséñame, ¡oh Trinidad!, cómo es tu libre miradaEnséñame, ¡oh Trinidad!, pues es la más bella y preciada

Enséñame, ¡oh Trinidad!, cómo es tu libre miradaEnséñame, ¡oh Trinidad!, pues es la más bella y preciadaLa más pura de amor, la más pura de amor

No sé que viste en mi (Estación I)

Ahí estás Tú
Esperando la sentencia en silencio
Se alza un grito entre la gente
Que prefiere a un criminal antes que a ti

Y allí estás Tú
Tan llagado que cuesta reconocerte
Entre burlas e insultos, sin amor sin amigos
Hemos huído todos de la cruz

Pues yo también, he sido uno de ellos
He preferido cualquier cosa antes que a ti
Te he dado la espalda un sinfín de veces
No he dejado que te muevas en mí

Y aún así dices que me amas
No sé qué viste en mí

¿Qué viste en mí?
Sabes que yo no merezco tanto
Pero yo necesito, tu amor infinito
Por favor, no me dejes sin ti

Ayúdame a que valga la pena
Me he dado cuenta que no puedo estar sin ti
Que valga la pena, que viva tu condena
Junto a María de rodillas ante ti

Perdóname
Ahora aquí me tienes
Derramado a tus pies

Sé que cometí el error
De anteponer a tus caminos la razón
Sé que volveré a caer
Más de mil veces fallaré a tu perdón

Y aún así dices que me amas
No sé que viste en mí.

Madre de Hakuna

Llévame contigo
A todos lados
Que pueda dormir tranquilo
Bajo tu precioso manto

Y llévame contigo
Y no me sueltes de la mano
Y que cuando sienta frío
Note tu cálido abrazo

Y llévame contigo
A donde quieras
Y es que no hay mayor consuelo
Que una madre que te quiera
Y que algún día pudiera
Al cielo ir por tu escalera
Y entender que contigo, madre querida
Valió la pena

Que no me canse nunca de mirarte
Y repetir con humilde devoción
Te quiero con locura, preciosa madre
Tú, el mejor regalo de mi Dios

Que no me canse nunca de mirarte
Y repetir con humilde devoción
Te quiero con locura preciosa madre
Tú, madre de Hakuna
Ay, ay, ay, mi corazón